MANCHAS EN EL BIGOTE: ¿CÓMO REDUCIRLAS?

Artículos
Manchas en el bigote: ¿qué son y por qué aparecen?

Las manchas en el bigote corresponden a una alteración de la pigmentación de la piel conocida como melasma, que afecta principalmente a mujeres mayores de 20 años, sobre todo a aquellas que tienen la piel oscura (p.ej., origen hispánico, asiático, africano, etc.). El melasma se caracteriza por la aparición de manchas irregulares de color gris o marrón en áreas expuestas al sol, como el cuello, los antebrazos o la cara. Las zonas del rostro donde suele presentarse son la frente, las mejillas, el puente de la nariz, el mentón y encima del labio superior (bigote).

El melasma se origina por un exceso de producción de melanina, el pigmento natural de nuestra piel. Aunque se desconocen las causas exactas, se cree que algunos de los factores que pueden contribuir a la aparición o empeoramiento de esta afección de la piel son:

  • La exposición solar. La radiación ultravioleta estimula la producción de melanina. Esta es la razón por la que la pigmentación del melasma suele hacerse más evidente en verano.
  • Cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo o cuando se toman anticonceptivos orales.
  • Cosméticos irritantes. La irritación de la piel puede empeorar el melasma.
¿Se pueden prevenir?

Es importante destacar que el melasma es una alteración de la piel benigna y, por tanto, no supone un problema para la salud. Su prevención y tratamiento se deben básicamente a razones estéticas.

Para prevenir la aparición o empeoramiento del melasma en el labio superior, se dan las siguientes recomendaciones:

  • Protegerse del sol, evitando la exposición a la luz solar en la medida de lo posible y utilizando cosméticos con una fotoprotección alta (FPS 50+), ya sea verano o invierno.
  • Utilizar cosméticos suaves, que no contengan sustancias irritantes.
  • Evitar depilarse con cera, ya que puede inflamar la piel y empeorar el melasma.
¿Cómo reducir las manchas en el bigote?

El melasma puede atenuarse o desaparecer por sí solo, por ejemplo, al dejar de tomar la píldora anticonceptiva o después del embarazo. Sin embargo, también puede durar años o incluso no desaparecer nunca. En estos casos, se puede recurrir a los tratamientos disponibles, que incluyen:

  • Cosméticos con fármacos y otros agentes despigmentantes que se aplican sobre la zona afectada.
  • Peelings químicos con sustancias como el ácido salicílico o el ácido glicólico que permiten retirar las capas más externas de la piel.
  • Distintos tipos de láser (p.ej., fraccionados, luz intensa pulsada, Q-switched…).

También puede ser necesaria la combinación de varios tratamientos, y siempre han de ir acompañados del uso de fotoprotectores durante todo el año. En cualquier caso, es imprescindible que sean recomendados y/o llevados a cabo por profesionales cualificados de centros especializados.

ES-AGNA-220488